Aparte del ajo, no tiene nada que ver con las ostras.
La tortilla de ostras tiene una carne tierna, una textura suave y una textura suave y melosa. ¡Se agota nada más servirla!
Ingredientes: ostras, huevos, fécula de boniato, sal, aceite de cocina.
Métodos específicos:
1. Limpiar las ostras compradas. Primero ponga la carne de ostra en un recipiente, enjuáguela con agua limpia varias veces, luego póngala en un recipiente grande, agregue un poco de harina o maicena, frótela suavemente y luego límpiela.
2. Poner las ostras lavadas en un bol grande, añadir una cantidad adecuada de sal y 2 cucharadas de fécula de boniato y remover uniformemente. Rompe 3 huevos en un tazón, rómpelos en el líquido del huevo y reserva.
3. Vierta el aceite de la olla. Después de que el aceite esté caliente, vierta las ostras cocidas y fríalas hasta que estén cocidas. Abra las ostras por separado.
4. Vierte el líquido del huevo batido sobre las ostras cocidas durante 8 minutos y ástalas lentamente a fuego lento. Una vez que los huevos estén cuajados, fríelos durante 3-5 minutos, luego retíralos de la sartén y córtalos en trozos pequeños.
Las ostras al vapor con ajo son tan aromáticas que no podrás dejar de comerlas. Las ostras cocidas son frescas y tiernas, con una textura suave, ¡lo que hace que la gente sea aún más adictiva!
Ingredientes: ostras, ajo, mijo, salsa de soja, aceite de cocina.
Métodos específicos:
1. Utilice un cepillo para limpiar las conchas de las ostras, lave la carne de las ostras y póngala en un plato.
2. Cortar los ajos en ajos muy picaditos y cortar el mijo en aros y reservar.
3. Calentar la sartén. Vierta una cantidad adecuada de aceite. Cuando la temperatura del aceite esté caliente al 50%, agregue el ajo y el mijo y reserve.
4. Usa una cuchara pequeña para esparcir el ajo frito en cada ostra y luego rocía con salsa de soja.
5. Después de que hierva el agua de la vaporera, añade las ostras y cocina al vapor durante 5-6 minutos. Cuando llegue el momento, podrás sacarlo, abrir la tapa y la casa se llenará de fragancia. Las ostras estaban tan ricas que no podía dejar de comerlas e incluso bebí el jugo. ¡Qué delicioso!
Hemos preparado dos platos de ostras caseros, ¿no te parece muy sencillo? Amigos a quienes les guste, recuerden darle me gusta~