Las ostras son la gasolinera de los hombres.
Las ostras son gasolineras para hombres. La siguiente frase son salones de belleza para mujeres. Las ostras son un ingrediente tímido. Esta timidez no sólo se refleja en la tierna y regordeta carne de ostra escondida bajo la dura concha, sino también en el hecho de que la ostra en sí representa el alimento del "amor". En la mitología griega antigua, las ostras se asocian con el amor. Los occidentales las llaman "comida del diablo dada por Dios". En China, las ostras tienen otra explicación: una gasolinera para hombres y un salón de belleza para mujeres.