Hoy en día, mucha gente mastica nuez de betel. ¿Cuáles son los peligros de masticar nuez de betel para el cuerpo?
La masticación excesiva de nuez de betel es perjudicial para la salud humana y mental.
El consumo excesivo de nuez de betel también puede provocar síntomas de intoxicación, que se manifiestan como excitación, ojos apagados, temblores en todo el cuerpo, marcha inestable, comportamiento extraño o grosero, además, puede provocar psicosis aguda, incluyendo; alucinaciones auditivas, engrandecimiento personal, delirios obsesivo-compulsivos, delirio, etc.
Lesiones en la cavidad bucal humana
1. Los músculos masticatorios muerden la nuez de betel que contiene una gran cantidad de celulosa, lo que causará grandes daños a los músculos de la mordida y a las articulaciones mandibulares a largo plazo. correr. También puede afectar la articulación temporomandibular, provocando dolor y lesiones en la articulación temporomandibular. Tan pronto como se cierra la boca, aparecerán sonidos extraños, lo que causa un gran dolor al paciente y no es fácil de tratar.
2. La fibra de nuez de betel es espesa y dura, lo que puede dañar fácilmente las encías u obstruir los dientes, provocando inflamación entre los dientes, junto con la acumulación de calcio y residuos de nuez de betel entre los dientes. eventualmente provocar hinchazón y supuración de las encías, dolor y otras enfermedades periodontales. En casos severos, es necesario extraer los dientes. En ocasiones se formará sarro en la boca e incluso los dientes pueden romperse o agrietarse.
3. La nuez de betel puede provocar fibrosis y manchas blancas en la mucosa bucal, que son los primeros síntomas del cáncer bucal.
Daño al sistema digestivo
La razón principal es que algunos componentes de la nuez de betel pueden reducir los nervios gustativos del cuerpo humano y estimular la secreción de saliva. Si la nuez de betel se consume durante mucho tiempo, el sabor se desequilibrará. Además, tragar los residuos de nuez de betel en el estómago irritará la pared del estómago humano, reducirá la función digestiva e incluso provocará perforación gástrica en casos graves.
En resumen, por tu propia salud, pase lo que pase, no puedes ser codicioso, comer con moderación y no comer demasiado.