Nueve tabúes sobre beber agua de rosas
1. Las mujeres embarazadas y en posparto no deben beber alcohol. Las rosas son de naturaleza cálida, tienen el efecto de promover la circulación sanguínea y eliminar la estasis sanguínea, y pueden estimular fácilmente la contracción uterina, lo que no es bueno para las mujeres embarazadas y en posparto.
2. Las rosas se remojan en demasiada agua y no se pueden beber. Debido a que el té de rosas demasiado fuerte contiene demasiadas sustancias aromáticas y polen, irritará el cuerpo humano.
El agua empapada de rosas no es apta para personas con problemas del sistema digestivo, como úlceras gástricas o gastritis.
Si padeces enfermedades infecciosas, como fiebre, resfriado, neumonía, etc., debes evitar beber té de rosas.
5. El té de rosas contiene sustancias irritantes gastrointestinales. Si tienes síntomas de diarrea, debes evitar beber té de rosas.
6. Algunos pacientes con presión arterial alta o enfermedades cardiovasculares deben intentar evitar el consumo frecuente de té de rosas, ya que agravará los síntomas de la presión arterial alta.
7. Es mejor no tomar suplementos como el ginseng antes de remojar las rosas en agua. Estos suplementos son propensos a reacciones adversas con las rosas, provocando malestar físico.
8. Si las personas que remojan rosas en agua están tomando anticonceptivos orales u otros medicamentos al mismo tiempo, primero deben consultar a su médico sobre la posibilidad de interacción.
9. El té de rosas no debe consumirse con el estómago vacío ni en exceso, porque fácilmente puede provocar una secreción excesiva de jugo gástrico, aumentar la secreción de ácido gástrico y provocar molestias gastrointestinales.