Existen varias técnicas para hacer malvaviscos.
Preparación del material: Los ingredientes principales incluyen azúcar, jarabe de maíz, agua, bolsas de papel, boquillas de papel y almidón de maíz en polvo.
1. Revolver el almíbar: Coloca el azúcar, el almíbar de maíz y el agua en una olla grande a fuego medio y revuelve hasta que la mezcla hierva y el azúcar se disuelva por completo.
2. Hervir el almíbar: Una vez que el azúcar esté completamente disuelto, ajuste el fuego a alto y use un termómetro para almíbar para calentar el almíbar a 270 °F (aproximadamente 132 °C). Mientras el almíbar hierve a fuego lento, evite revolver demasiado y simplemente agite la olla suavemente.
3. Prepara el recipiente y el almidón: Espolvorea una capa de maicena en polvo de manera uniforme sobre el recipiente para evitar que los malvaviscos se peguen al recipiente.
4. Envíe el almíbar: Una vez que el almíbar alcance los 270 F (132 C), enfríe un poco el almíbar y viértalo lentamente en un tazón para mezclar. Batir el almíbar a velocidad media hasta que esté esponjoso, suave y tenga textura de malvaviscos.
5. Dar forma: Vierte el almíbar en una manga pastelera, exprímelo en el recipiente preparado y exprime la forma que más te guste. Las innovaciones se pueden adaptar a las preferencias personales, añadiendo sabores y colores.
6. Solidificar completamente: Coloca los malvaviscos con forma en el refrigerador y deja que se solidifiquen por completo para obtener el clásico sabor de los malvaviscos. Pasado un rato, saca los malvaviscos, espolvoréalos nuevamente con maicena para evitar que se mojen las manos y sírvelos después de procesarlos.
Precauciones en el proceso de elaboración de malvaviscos
1 Operación segura: El almíbar alcanzará altas temperaturas durante el proceso de calentamiento, así que tenga cuidado con las quemaduras. Asegúrese de controlar la temperatura del almíbar con un termómetro para almíbar para evitar derramar el almíbar sobre la piel. Al mismo tiempo, si hay niños involucrados en el parto, asegúrese de que haya supervisión y orientación de un adulto.
2. Revolver y calentar el almíbar: Al remover y calentar el almíbar, removemos lo más suavemente posible para evitar que el almíbar salpique o quede pegajoso. También asegúrate de que no quede almíbar en el fondo de la olla, para no afectar la temperatura y la textura del almíbar.
3. Prepara herramientas y materiales: Asegúrate de preparar tazones, batidoras y otras herramientas necesarias y limpiarlas. Garantizar la frescura y calidad de los ingredientes, como el azúcar y el jarabe de maíz.
4. Limpiar el área y superficie de trabajo: La producción de malvaviscos implica un almíbar espeso, por lo que se debe mantener limpia el área y superficie de trabajo durante el proceso de producción. Limpie las áreas y superficies de trabajo antes de elaborar para un mejor manejo durante el proceso de elaboración.
5. Evite revolver demasiado: Al servir el almíbar, evite revolver demasiado para evitar que se pierda la textura esponjosa y suave del almíbar. Revuelva moderadamente hasta que comiencen a formarse malvaviscos.
6. Controlar la temperatura del almíbar: La temperatura del almíbar es la clave del éxito en la elaboración de malvaviscos. Tenga cuidado de calentar el almíbar a 270 grados Fahrenheit (132 grados Celsius). Una temperatura demasiado alta puede hacer que el almíbar se queme, mientras que una temperatura demasiado baja puede afectar la textura.
7. Maduración y almacenamiento: Los malvaviscos cortados deben madurarse completamente y secarse a temperatura ambiente, en lugar de sellarse en un recipiente hermético. Si los malvaviscos no están completamente curados y almacenados en un recipiente sellado, pueden humedecerse y enmohecerse.
Si sigues las precauciones anteriores, podrás preparar malvaviscos deliciosos de forma eficaz y garantizar la seguridad y la higiene. Recuerde leer la receta y las instrucciones de seguridad antes de preparar malvaviscos y ajuste la receta y los pasos según sus circunstancias y preferencias personales.