Aplaude con las palmas de tus manos y tus pies florecidos de ciruela.
A un gallo le encanta pelear con los demás, siempre quiere demostrar que tiene conocimientos y nunca se preocupa por los sentimientos de los demás. Sin embargo, una vez perdida la batalla, el gallo no se deprimirá. La forma de ser un gallo es decirle a todos tu punto de vista y hacer que la gente crea que perteneces al gallo y que estás del lado del gallo. Cuando el Gallo está en un estado negativo, el Gallo hará todo lo posible para mantener su opinión y creer que tiene razón.
Admite sólo tus propias fortalezas y no tus defectos. Pero si analizas el corazón profundo del gallo, encontrarás que el propósito del gallo es sólo confirmar su propio valor y consolarse, y no necesariamente imponerse a los demás. Pero como al gallo le encanta fanfarronear, no puede conocerse realmente a sí mismo, ni puede saber el daño que le causa al gallo la fanfarronería y la exageración.