Los efectos del té de hibisco
El té de hibisco puede eliminar el calor y desintoxicar, y se utiliza para la disentería, la diarrea y la leucorrea.
El té de hibisco, también llamado té Roselle por los taiwaneses, se parece al conocido jugo de grosella negra de Ribena en color, pero tiene un sabor ácido y fragante, como el limón, y es una bebida bastante popular en verano. A algunas personas también les gusta agregar azúcar de roca o miel al té de hibisco para hacer que el aroma floral sea más pronunciado y darle una sensación dulce y refrescante.
El té de hibisco tiene el efecto de fortalecer la elasticidad de los vasos sanguíneos y aliviar el calor. Debido a que puede ayudar a la digestión, algunas personas también beben té de hibisco como té adelgazante. Sin embargo, las personas con presión arterial baja no deben beberlo, porque el té de hibisco puede reducir la presión arterial y el colesterol. Si ha estado chupando pastillas debido al dolor de garganta, es mejor beber una taza de té de hibisco para ayudar a eliminar la hinchazón, el dolor y las molestias del frío. La vitamina C que contiene es la más alta entre todos los tés de flores.
El té de hibisco también se puede utilizar como té para la resaca; si bebes demasiado, bebe una taza cada dos días para aliviar la resaca y el edema. El té de hibisco contiene antioxidantes al igual que el té normal, pero su contenido de antioxidantes es mayor que el del vino tinto. Por lo tanto, algunas personas sugieren que si le preocupa el contenido excesivo de alcohol en su cuerpo, evite beber vino tinto y en su lugar beba té de hibisco, que es relativamente beneficioso para el cuerpo.