La forma de aplicar los encurtidos y pimientos del noreste es similar a la de la salsa de chile, de esas en las que los pimientos rojos se pican y se encurten.
Ingredientes: 180 g de pimiento rojo, 40 g de ajo, 40 g de jengibre, 15 g de sal, 25 g de vino blanco de alta graduación.
1: Después de lavar el pimiento rojo, quitarle el tallo y secarlo al sol.
Dos: Lavar y pelar el jengibre, aplanar y pelar los ajos, juntar el jengibre y el ajo y cortarlos en partículas pequeñas con un cuchillo, o triturarlos con una picadora de carne.
Tres: Después de secar el vapor de agua, pica lentamente los pimientos con un cuchillo.
Cuatro: Coger un bol grande sin agua ni aceite, añadir jengibre, ajo, pimienta, sal y 10g de vino blanco de alta graduación y dejar marinar durante la noche.
Cinco: Pon la salsa de chile encurtida en una botella de vidrio esterilizada y secada con agua hirviendo. Use una cuchara para compactar la salsa de chile cada vez y luego vierta un poco de vino blanco de alta concentración después de llenar. No pongas jugo de pepinillos en la botella.
Seis: Producción completada. Una vez enlatada y sellada la salsa de chile, es mejor mantenerla en un lugar fresco durante medio mes. Si lo comes con anticipación, está bien, pero no será tan fragante.
Datos ampliados:
La salsa de chile se caracteriza por un fuerte sabor a ajo y un fuerte sabor picante. Puede usarse para pedir, amasar fideos, servir platos y también para revolver. -freír, sofreír y asar. El sabor picante único, el sabor agridulce, especialmente apetitoso. Delicioso con arroz, empanadillas, bollos al vapor, tartas o cualquier plato. Se puede decir que es un condimento universal.
El contenido de vitamina C del pimiento ocupa el primer lugar entre las hortalizas. La cáscara del fruto del chile contiene capsaicina, que es picante y puede estimular el apetito.
Aunque la salsa de chile es rica en nutrientes y tiene un importante valor medicinal, su consumo excesivo es perjudicial para la salud humana. Porque demasiada capsaicina puede irritar gravemente la mucosa gastrointestinal, provocando que esté muy congestionada y acelere la peristalsis, provocando dolor de estómago, dolor abdominal, diarrea y ardor y escozor anal, e inducir enfermedades gastrointestinales.