La perra no está preñada ni ordeñando.
La pseudopreñez se refiere a una serie de cambios únicos en la perra preñada cuando la perra no se aparea o queda preñada después del apareamiento. El embarazo falso no provocará enfermedades del tracto reproductivo, pero afectará la reproducción normal de las perras.
Suele ser muy nutritivo, ¡pero algunos factores externos hacen que produzca leche!
1. Masajear los senos con movimientos circulares, tres veces al día, cuatro veces por semana.
2. Déle al perro un medicamento con leche, porque la leche para perros debe venderse en tiendas para perros normales.
3. Devolver la inyección de leche
4. ¡Deja que la naturaleza siga su curso! ¡En determinadas circunstancias, los perros y las perras lactantes tendrán este fenómeno como respuesta a la misericordia!
Los mamíferos pueden tener fenómenos similares durante la pubertad, que está relacionada con la secreción hormonal y el desarrollo mamario en el cuerpo y se encuentra dentro del rango normal. Siempre que no haya bultos duros ni enrojecimiento en los pechos de la perra, no te preocupes, este fenómeno desaparecerá después de la pubertad.
Los casos leves pueden recuperarse por sí solos sin tratamiento. En casos graves, se puede utilizar un tratamiento hormonal, como metiltestosterona, 10 mg administrados por vía oral a perros todos los días; dietilestilbestrol, inyección intramuscular o administración oral, la dosis es de 0,2 a 0,5 mg/hora. En el caso de perras frecuentes que no son aptas para la reproducción, se requiere una cirugía de castración para prevenir fundamentalmente la aparición de embarazos falsos.
El pseudoembarazo suele producirse 2 o 3 meses después del periodo de celo. El abdomen de la perra está agrandado y la palpación de la pared abdominal puede hacer que el útero se vuelva más grueso y que las glándulas mamarias se desarrollen e hinchen, lo que permite el ordeño. Las perras son impacientes, buscan nidos en la oscuridad, les gusta beber agua, tienen poco apetito y, en ocasiones, presentan síntomas como vómitos y poliuria. El diagnóstico se puede confirmar con base en el historial reproductivo, la palpación abdominal, la fotografía de rayos X y el diagnóstico por ultrasonido, y descartando un verdadero embarazo.