¿Cómo es la vida de un luchador de sumo japonés?
Cada país tiene su propia cultura y arte digno de heredar. En Japón, los japoneses, especialmente los adolescentes, aman y admiran a los destacados luchadores de sumo, al igual que las estrellas de cine y televisión, y se han convertido en figuras famosas. Quizás sea cierto el dicho de que si quieres distinguirte delante de los demás, debes sufrir detrás de los demás. Los aparentemente gloriosos luchadores de sumo frente al escenario, pero el estilo de vida detrás de ellos nos deja sin palabras. En las competiciones de sumo japonés no hay niveles. Por tanto, cuanto más pesado seas, más ventaja tendrás. Por tanto, la primera tarea a la que se enfrentan los jugadores es ganar peso. Después de observar este método de engorde, me di cuenta de que ese tipo de estilo de vida es probablemente más doloroso que perder peso. Para ganar peso, los luchadores suelen utilizar un método de engorde que se centra en la dieta y el sueño. Diariamente, sólo comen una comida especial llamada "Lux Hotpot". Se trata de una comida típica y nutritiva, que consiste en guisar carne de res, pescado, productos de soja, verduras, etc. en una olla grande. Los luchadores de sumo solo comen dos comidas al día, el almuerzo y la noche, ambas son estofado caliente, pero el sabor cambia cada día. Por lo general, después de comer estofado, algunos luchadores de sumo también comen muchos pasteles de crema y otros postres, y luego se van a la cama inmediatamente después de comer. Como no hay límite de peso en la lucha de sumo, cuanto más pesado sea el cuerpo, mejor, por lo que la mayoría de los jugadores pesan más de 300 kilogramos. Se puede decir que cada comida se come hasta la garganta y luego comienza el sueño. También son muy intensos cuando se practican. Los ejercicios de fitness destruyen y desgarran los músculos y luego hacen que los músculos crezcan. Realmente no sé cómo describir su estilo de vida. ¡Quizás cada profesión tenga sus propias dificultades y esfuerzos! Parece una forma de sobrevivir sin ningún esfuerzo mental, pero la tortura física y el dolor no son mucho. ¡Quizás esto sea la impotencia de sobrevivir!