Quieres comer mucha fruta
De hecho, desde el punto de vista nutricional, la fruta no es un alimento poco energético, contiene diferentes calorías y azúcar. Debido a que tiene un sabor muy dulce, es fácil comer demasiado y el azúcar que contiene se convertirá en grasa y se acumulará. Especialmente comer mucha fruta en la cena tiene más probabilidades de provocar acumulación de grasa. Por ejemplo, 100 gramos de fresas aportan unas 30 kilocalorías, y 100 gramos de lichis aportan unas 90 kilocalorías. Si puedes comer mucho a la vez, tu ingesta calórica no será baja. Por poner otro ejemplo, en verano algunas chicas solo comen sandía, pero en realidad media sandía de tamaño mediano permite consumir sin saberlo 680 kilocalorías, lo que equivale a unos tres platos de arroz. Por lo tanto, comer únicamente fruta puede resultar contraproducente.
De hecho, algunos otros nutrientes esenciales para el cuerpo humano, como proteínas, grasas y oligoelementos como calcio, hierro, zinc, etc., se encuentran en muy poca cantidad en las frutas. Por tanto, el consumo prolongado de frutas en la cena, ya sea excesivo o insuficiente, provocará una ingesta insuficiente de proteínas y hierro, lo que provocará anemia y disminución de la función inmune. La forma correcta de perder peso debe ser comer ligero y hacer ejercicio con regularidad. Está bien comer frutas de vez en cuando, pero no todos los días.