¿Por qué no puedes comer fresas durante el embarazo?
Las fresas rojas tienen un aspecto delicioso, un sabor ácido y muy apetecible. A muchas mujeres embarazadas les gusta comerlas. Sin embargo, las fresas también son alimentos relativamente fríos y muchas mujeres embarazadas no se atreven a comerlas. Entonces, ¿pueden las mujeres embarazadas comer fresas durante el embarazo?
Las mujeres embarazadas pueden comer fresas durante el embarazo. Las fresas contienen una gran cantidad de ácido de frutas, que puede promover la absorción de hierro en los intestinos y el estómago y puede prevenir eficazmente la anemia en mujeres embarazadas. Además, comer fresas en verano también puede aliviar el calor del verano, calmar la sed y prevenir el estreñimiento. Sin embargo, las fresas son de naturaleza relativamente fría y las mujeres embarazadas que comen demasiado son propensas a sufrir diarrea.
A la hora de elegir fresas, recuerda no elegir fresas que estén deformes y podridas, de lo contrario sufrirás diarrea fácilmente. Y asegúrese de lavar las fresas con agua limpia antes de comerlas, porque la piel de las fresas contiene mucho polvo y pesticidas. Al lavar las fresas, no cortes las cabezas, de lo contrario las bacterias pueden entrar más fácilmente.
No todas las mujeres embarazadas son aptas para comer fresas. Las mujeres embarazadas con cuerpos fríos no son aptas para comer fresas. Por lo tanto, comer fresas que ya están frías aumentará la carga sobre el tracto gastrointestinal y provocará diarrea intensa. Las personas con diabetes no pueden comer más fresas porque las fresas tienen mucha glucosa y comer muchas aumentará el azúcar en la sangre, lo que no es bueno para el feto. También se recomienda a las mujeres embarazadas que sufren diarrea con frecuencia que no coman fresas, ya que las fresas pueden favorecer la excreción.