¿Cómo deben las madres embarazadas solucionar las hemorroides y las heces con sangre durante las primeras etapas del embarazo?
1. ¿Cómo deben solucionar las madres embarazadas las hemorroides y las heces con sangre? Las hemorroides sangrantes en mujeres embarazadas deben tratarse con dieta, corrección de los hábitos intestinales y medicamentos tópicos. Si los tratamientos conservadores fallan, también se puede considerar la cirugía para corregir el problema. Si el tratamiento conservador para el sangrado masivo falla, puede tener un impacto en las mujeres embarazadas, incluido el feto. En este momento se debe considerar la cirugía. Cuando las hemorroides causan sangrado abundante, una mujer embarazada se vuelve anémica. Si una mujer embarazada está anémica, su propio cuerpo se verá afectado y también su feto. Por ejemplo, la nutrición, el crecimiento y el desarrollo fetal pueden verse afectados por diversos nutrientes consumidos por las mujeres embarazadas. Aquí es cuando se necesita cirugía.
2. ¿Qué causa las hemorroides durante el embarazo? Las mujeres que comen demasiados alimentos nutritivos y delicados durante el embarazo, junto con la falta de ejercicio, son propensas al estreñimiento. En casos graves, pueden desarrollar hemorroides. Las mujeres embarazadas tienen una función gastrointestinal deficiente. Si tiene dificultad para defecar, empujará con fuerza y luego aumentará la presión venosa cerca del ano, agravando aún más las hemorroides.
3. Los peligros de las hemorroides durante el embarazo: Después del embarazo, debido al aumento de la presión abdominal y la compresión uterina, las hemorroides serán más evidentes que antes del embarazo. Por lo tanto, el prolapso de hemorroides fuera del ano es más común de lo habitual, lo que afecta gravemente la salud y la vida de la mujer embarazada, haciéndola sentir incómoda y provocando estrés, lo que afecta gravemente su normal trabajo, vida y estudio. Especialmente durante el parto natural, la presión abdominal aumentará bruscamente, provocando que las hemorroides se vuelvan edematosas, evertidas, prolapsadas o encarceladas, e incluso difíciles de retraer, provocando gran dolor a la mujer embarazada y afectando su salud física y mental durante el puerperio y la baja por maternidad. Por eso, cuando se presentan hemorroides, además de dieta y ejercicio, en casos severos también se requiere atención especializada.