¿Cómo puedo conservar la carne de ostra?
Prepare una caja de espuma, coloque cuatro o cinco bolsas de hielo en ella, coloque ordenadamente las ostras sin cáscara, cubra la caja de espuma y guárdelas en el área de conservación del refrigerador.
Envuelve las ostras de media concha en film transparente, introdúcelas en una caja sellada con la concha y guárdalas en la zona de conservación del frigorífico.
Escurre el agua de la superficie de la carne de ostra, envuélvela en film transparente, introdúcela en una bolsa sellada y guárdala en la zona del congelador del frigorífico.
A temperatura ambiente la temperatura cambia mucho, lo que no es adecuado para la conservación de las ostras. Si se almacenan, las ostras con concha se pueden almacenar durante unas ocho horas, las ostras con media concha durante unas cuatro horas y las ostras con media concha durante no más de dos horas.
Generalmente, las ostras sólo se pueden conservar en el frigorífico durante unos 3-7 días. Si se almacena durante un mes, es probable que haya muerto y se haya deteriorado, y que se reproduzca una gran cantidad de bacterias. Después de ser ingeridos, las bacterias dañinas invaden el cuerpo humano y pueden provocar síntomas de intoxicación alimentaria como dolor abdominal, diarrea, náuseas y vómitos, que son perjudiciales para la salud. Por ello, se recomienda consumir las ostras que compre lo antes posible y no almacenarlas por mucho tiempo.
La ostra es un marisco que vive en el océano y es apto para vivir a una temperatura de 4-5 grados. Si se saca del mar y se almacena en un ambiente de alta temperatura, morirá fácilmente, generará bacterias y emitirá un olor. El tiempo de almacenamiento no es largo, solo se puede almacenar durante aproximadamente 1 a 2 días.
La temperatura en las zonas heladas es baja, normalmente siete u ocho grados bajo cero. Coloque las ostras y guárdelas. Si se almacenan correctamente, las ostras con concha generalmente se pueden almacenar durante dos o tres días, las ostras con media concha durante cinco a siete días y las ostras con carne durante cinco a siete días.
Puedes optar por enfriar las ostras. Empacar en bolsas de plástico y guardar en el frigorífico. Ésta es la forma más cómoda de conservar la frescura. También se puede conservar con sal, que tiene efecto conservante. Puedes mezclar las ostras con sal y conservarlas frescas en el frigorífico.