Los trabajadores cobran 70.000 yuanes por cuatro platos en la cantina. ¿Cómo debería proteger sus derechos cuando se encuentra con un jefe turbio?
También hay informes de que los trabajadores no reciben el salario que merecen después de completar su trabajo. Por supuesto, deben proteger sus propios derechos e intereses. Mientras pedía salario, comí cuatro platos en la cantina, pero el jefe me cobró 70.000 yuanes. Pero es concebible que varios trabajadores inmigrantes comieran platos divinos por valor de 70.000 yuanes. Es sólo que estos jefes quieren utilizar algunas razones injustas para evadir sus responsabilidades.
Primero, para estos jefes que no tienen ninguna integridad, no podemos juzgar esto de antemano. ¿Cuál es la personalidad de las personas para las que trabajamos? Sin embargo, las consecuencias posteriores las debemos soportar nosotros mismos, pero la gravedad de las consecuencias está mucho más allá de nuestra imaginación. Por eso, cuando salimos a trabajar, lo primero que debemos hacer es tener cuidado a la hora de firmar un contrato con nuestro jefe. Si no lo entiende, puede acudir a algunas instituciones profesionales para analizar los contratos laborales pertinentes, porque sólo así podemos utilizar los contratos, algo jurídicamente vinculante, para proteger nuestros derechos e intereses legítimos en el trabajo futuro.
En segundo lugar, cuando te encuentres con un jefe tan "despiadado", no debes ser impulsivo, y mucho menos elegir luchar para resolver los problemas relacionados. Debemos buscar ayuda legal, porque como ciudadanos de China, cada uno de nosotros tiene nuestros propios derechos y obligaciones, pero no obtenemos las recompensas correspondientes cuando cumplimos con nuestras obligaciones. En este momento, puede buscar algunos centros locales de asistencia jurídica gratuita para resolver el problema por medios legales, porque la impulsividad no puede resolver el problema. Solo empeorará las cosas, así que mantenga la cabeza fría cuando encuentre problemas para poder resolverlos mejor y minimizar las pérdidas.
En tercer lugar, finalmente, no confíes fácilmente en los demás, porque no quieres dañar el corazón de las personas, pero debes tener cuidado con algunas personas. Podemos prometer no hacer cosas que sean perjudiciales para el mundo, pero no podemos garantizar que otros no las harán. Por tanto, la premisa para evitar lesiones es hacerse más fuerte y hacer ajustes pase lo que pase.