Dos alimentos súper nutritivos que deben consumir las mujeres embarazadas: albóndigas de ternera y pollo.
Albóndigas de ternera: un tesoro escondido en nutrición
Las albóndigas de ternera no sólo son deliciosas, sino también nutritivas. Es rico en proteínas, tiene una proporción perfecta de aminoácidos y es rico en minerales, especialmente hierro, que es la clave de la hematopoyesis. Las bolas de carne también pueden ayudar a reponer el qi y la sangre, fortalecer el bazo y el estómago y fortalecer los músculos y huesos. Son los mejores compañeros durante el embarazo. Sin embargo, dado que la carne de res no es fácil de digerir, debes disfrutarla siempre con moderación.
Pollo: una gran familia de proteínas
El pollo es una gran familia de proteínas con muchos tipos, de alta digestibilidad y fácil de absorber por el organismo. ¡Los fosfolípidos del pollo son muy importantes para el crecimiento y el desarrollo y son una gran fuente de grasas y fosfolípidos en nuestra dieta! El pollo tiene un buen efecto terapéutico sobre la desnutrición, los escalofríos, la menstruación irregular y otros problemas. Además, el pollo es tierno y más fácil de digerir que la carne de res, por lo que las madres embarazadas pueden comer más.