A la mayoría de los niños les gusta comer frutas. ¿Cómo podemos darles a nuestros hijos frutas que sean saludables e inofensivas?
A la mayoría de los bebés les gusta comer frutas, pero los padres deben darles a sus bebés una cantidad razonable de fruta, de lo contrario, la salud del bebé se verá afectada por una ingesta inadecuada de frutas. Entonces, ¿a qué cuestiones deben prestar atención los padres cuando dan frutas a sus bebés? A la mayoría de los niños les gusta comer frutas. ¿Cómo podemos alimentar a nuestros hijos con frutas que sean saludables e inofensivas?
En primer lugar, los padres deben comprar frutas a través de los canales habituales y tratar de comprar frutas libres de contaminación para sus bebés. Los padres también deben intentar comprar frutas de temporada en lugar de frutas fuera de temporada. Al mismo tiempo, los padres deben observar atentamente las frutas a la hora de elegirlas y tratar de no comprar frutas con apariencia extraña, colores brillantes o daños. De esta forma, podrás comprar frutas frescas que tus hijos puedan comer con confianza.
En segundo lugar, los padres deben lavar la fruta en el lugar. Si se trata de una fruta que se puede pelar, se debe pelar y dársela al bebé. De lo contrario, los padres deben remojar la fruta en agua con sal durante diez minutos. Durante más de 10 minutos, enjuaga con agua limpia y dáselo al bebé. Por supuesto, los padres deben lavar las frutas de acuerdo con los hábitos alimenticios de su bebé. Las frutas limpias deben consumirse el mismo día. Las frutas que no hayan sido limpiadas deben almacenarse adecuadamente. Asegúrese de comer las frutas sobrantes dentro de su vida útil.
Nuevamente, los padres deben manipular las frutas de acuerdo con la capacidad de masticación de sus bebés. Para los bebés más pequeños, pueden hacer puré las frutas o cortarlas en cubos, trozos, rodajas, etc. Además, cuando un bebé más pequeño come fruta solo, los padres deben observarlo de cerca y no hacerlo llorar o reír para evitar que se ahogue accidentalmente con la tráquea.
Finalmente, después de que el bebé coma la fruta, se le debe recordar que beba agua y se enjuague la boca. Debido a que el contenido de azúcar en las frutas es alto, tiene cierto efecto corrosivo en los dientes. Además, los padres deben dar frutas a sus bebés entre comidas, ni antes ni después de las comidas, y mucho menos comer frutas durante las comidas. Debido a que comer fruta antes de una comida afectará el apetito del bebé, comer fruta después de una comida no favorece la digestión y absorción de los alimentos, y el contenido nutricional de la fruta es relativamente simple, estas prácticas afectarán la capacidad del bebé para absorber suficientes nutrientes de alimento. Conclusión
Los padres deben comenzar con la compra, limpieza y almacenamiento de frutas, para que sus bebés puedan comer frutas de manera saludable e inofensiva.