Las mujeres embarazadas deben comer frutas peludas.
Fruta rica en nutrientes
La sandía es rica en vitaminas, refrescando y saciando la sed, ayudando a bajar la presión arterial y aliviando los edemas corporales. Sin embargo, la sandía es de naturaleza fría y su consumo excesivo puede dañar el bazo y el estómago, provocando distensión abdominal y diarrea. No comas más de 250 g de sandía al día para evitar la deshidratación o la diarrea.
Evita la sandía helada.
Evita especialmente comer sandía helada recién sacada de la nevera. Las temperaturas demasiado bajas pueden provocar contracciones y aumentar el riesgo de aborto espontáneo. La sandía tiene un alto contenido de azúcar, lo que también puede aumentar el azúcar en sangre en mujeres embarazadas y aumentar el riesgo de diabetes gestacional.
Diversas opciones de frutas
Además de la sandía, las mujeres embarazadas también pueden elegir manzanas, peras, plátanos, cerezas, fresas, uvas y otras frutas para satisfacer sus diversas necesidades nutricionales.
Disfruta con moderación y come saludablemente.
Recuerda, disfrutarlo con moderación y comer saludablemente es responsabilidad y elección de toda mujer embarazada. ¡Disfrutemos de una comida deliciosa y protejamos nuestra salud y la de nuestros bebés!