¿Qué deben hacer mis padres si no quieren saber sobre mi trabajo?
1. No insista en ser específico o preciso, trate de ceñirse a industrias u ocupaciones tradicionales con las que todos estén familiarizados.
Cuando presentamos nuestro trabajo a nuestros padres, también debemos aprender del segundo compañero y describirlo en un lenguaje sencillo, claro y fácil de entender en lugar de utilizar un vocabulario muy profesional. Cuanto más escuchan los padres, más confundidos se vuelven.
Cuando esta información está más allá de su alcance cognitivo y tratan de comprenderla utilizando su sistema de conocimiento familiar, a menudo se extravían. En este momento, si queremos hacer retroceder su forma de pensar, puede que no sea tan fácil.
2. Presta atención a tus palabras y sé paciente. También puedes dejar que otros te ayuden a comunicarte desde fuera.
A la hora de comunicarte con tus padres, primero debes tener paciencia y no mostrar disgusto o aburrimiento cuando tus padres te hagan preguntas. No digas siempre "no lo entiendes", entonces los padres pueden tener que replicar "yo he comido más sal que tú arroz".
Si siempre evades cuando tus padres te preguntan sobre los detalles de tu trabajo, dejarás la impresión de "evasión" en tus padres, lo que hará dudar aún más de la legitimidad del trabajo que estás haciendo.
Si hay personas de tu generación en las que tus padres confían, como primos, primos o amigos con los que creciste, sería mejor pedirles que te ayuden a comunicarse desde el exterior.
3. Muestra tus logros e incluso los beneficios que recibes en el trabajo a tus padres de manera oportuna. Esto les dará la impresión de que “tu trabajo es muy bueno” y estarán más dispuestos a apoyarte. tú.
La esencia de que los padres se preocupen por tu trabajo es que quieren que vivas una vida estable y que tengas una buena vida. Además, también pueden esperar que su trabajo sea lo suficientemente bueno como para "lucirlo" en las reuniones familiares.
Por lo tanto, en lugar de perder demasiado tiempo explicando el contenido del puesto, es mejor "chupar dinero debajo de la tetera" y decirles directamente que la empresa paga bien y que les está yendo bien. A veces, un bono de fin de año o una prenda de trabajo de marca harán que los padres se sientan "nada mal y bastante respetables".