¿Cuántas empresas de restauración hay en 2020?
Se puede decir que la comida para llevar se ha convertido en una parte indispensable de nuestra vida diaria, especialmente para los trabajadores de oficina y los estudiantes universitarios. Cuando no tienen tiempo para cocinar y no quieren comer en la cantina, la comida para llevar se ha convertido sin duda en nuestra mejor opción. Entonces, con la industria de la comida para llevar en auge, ¿es el desarrollo de la industria de la comida para llevar algo bueno o malo para nosotros?
En mi opinión, todo tiene dos caras. Hay ciertas razones por las que la industria de entrega de alimentos se está desarrollando tan rápidamente, lo que significa que esto es beneficioso, pero también tiene sus inconvenientes, que requieren que pensemos de manera racional y dialéctica.
En primer lugar, no hay duda de que el auge y la popularidad de la comida para llevar nos ha hecho la vida más fácil a muchos de nosotros. Cuando trabajan horas extras y estudian y no tienen tiempo para cocinar, cuando esperan a familiares en el hospital y no pueden moverse, cuando regresan a casa de la escuela por la noche y cuando están acostados en la cama los fines de semana sin querer moverse, la comida para llevar se ha convertido en una opción para la mayoría de nosotros. Al mismo tiempo, la comida para llevar también brinda a los comerciantes la oportunidad de desarrollar más negocios. Algunas tiendas pueden preparar platos deliciosos, pero debido a que están ubicadas en lugares remotos o han abierto recientemente, pocas personas las conocen, y la comida para llevar les brinda a estas empresas la oportunidad de exhibirse. Además, la comida para llevar también ha creado empleo para un gran número de personas. Hoy en día, los repartidores se pueden encontrar en todas partes en todas las ciudades.
Pero más allá de eso, ¿qué nos aporta el takeaway? Trae pereza, mala salud y contaminación. Para muchos restaurantes de comida para llevar, su comida no puede ser tan limpia como la comida casera. Para ganar tiempo, muchas empresas incluso hacen pasar las sobras de otras personas como buenas y las envían como comida para llevar. Al mismo tiempo, los envases para llevar también provocan una grave contaminación plástica. La mayoría de las loncheras no son biodegradables y son indelebles para el medio ambiente.
En el entorno actual, el auge de la comida para llevar se ha convertido en una tendencia imparable, pero todavía existen muchos problemas, grandes y pequeños, que requieren una mejora continua.