Compartir letras de Peach Blossom Wine
Compositor: Yu Sheng
Arreglista: Yu Sheng
Productor: Yu Sheng
Estoy de nuevo Llegué a esto bar.
Sentado en el mismo lugar de siempre
El viento hacía caer las flores de durazno, trayendo consigo una dulce fragancia.
Algunos de ellos parecen como si tuvieras la cara un poco roja.
Estoy acostumbrado a estar sin ti.
La costumbre de vagar sin rumbo
Era solo el viento que soplaba las flores de durazno hacia la ventana de madera.
Piensa en tu espalda balanceándose.
Vierte vino en mi corazón
Recuerda todas las escenas pasadas
En el árbol de flor de durazno de ese año.
Probé el vino en tus labios
El olor del vino enredó mis pensamientos y un viejo sueño.
¿Aún recuerdas haber tropezado en mi sueño?
¡Qué frívolo! Acordamos avanzar y nunca mirar atrás.
¿La tierra de quién será siempre?
Por desgracia, también me decepcioné cuando era joven y ridículo.
No sé cómo recoger mi corazón.
Si algún día recuerdas aquel ramo de flores de melocotón ligeramente dulces.
¿Puedes volver conmigo?
Creo que volveré al bar y me sentaré allí un día más.
Puedes perder esos viejos tiempos.
Aunque sople el viento florece el durazno y cae el vino.
Nunca volveré a pensar en ti.
Miré la tenue luz de la luna a través de la ventana de madera
Como tu última mirada tierna
Resulta que no puedo olvidarlo a pesar de todos mis esfuerzos. .
No sé dónde estás flotando.
Fue el olor a vino lo que me trajo de vuelta mis pensamientos y un viejo sueño.
¿Aún recuerdas haber tropezado en mi sueño?
¡Qué frívola! Acordamos avanzar y nunca mirar atrás.
¿La tierra de quién será siempre?
Por desgracia, también me decepcioné cuando era joven y ridículo.
No sé cómo recoger mi corazón.
Si algún día recuerdas aquel ramo de flores de melocotón ligeramente dulces.
¿Puedes volver conmigo?
Fue el olor a vino lo que me trajo de vuelta mis pensamientos y un viejo sueño.
¿Aún recuerdas haber tropezado en mi sueño?
¡Qué frívola! Acordamos avanzar y nunca mirar atrás.
¿De quién es la tierra para siempre?
Por desgracia, también me decepcioné cuando era joven y ridículo.
No sé cómo recoger mi corazón.
Si algún día recuerdas aquel ramo de flores de melocotón ligeramente dulces.
Nadie más que tú, el fin de los tiempos.