Bombardero B52
El piloto voló un bombardero de 84 toneladas por el aire y se estrelló contra el suelo unos segundos después.
En muchos espectáculos aéreos, las acrobacias aéreas son como un espectáculo visual, que no sólo puede mostrar el excelente rendimiento del avión, sino también reflejar el altísimo nivel de conducción de los pilotos de un país. Sin embargo, este rendimiento de vuelo aparentemente magnífico es en realidad muy peligroso, porque el piloto tiene que aumentar la velocidad del avión de combate mientras lo mantiene volando a baja altitud. Sin una mentalidad estable y técnicas operativas cualificadas, es fácil provocar accidentes aéreos. Por eso, el espectáculo aéreo también se conoce como "Bailando en el filo de un cuchillo".
Además, el "accidente de tráfico" de un avión de combate no es tan simple como una colisión en la carretera. Mientras haya un accidente, el avión inevitablemente se estrellará.
El 22 de junio de 1994, Estados Unidos y Rusia participaron en un mismo evento de intercambio en la Base Fairchild. Ese día, tres miembros de la tripulación del B-52 abordaron el avión y se prepararon para volar el bombardero de 84 toneladas para brindar un festín visual a la audiencia.
Al principio el avión despegó sin problemas y las acrobacias también fueron muy buenas. Sin embargo, mientras daba vueltas sobre el campo, el piloto de repente hizo un giro brusco. El bombardero B52 voló sólo a más de 80 metros de altura y, después de unos segundos, su morro miraba directamente al suelo a 90 grados. Se detuvo en menos de un minuto y se estrelló en el acto. Todas las personas a bordo sobrevivieron.
De hecho, todo piloto cualificado debe realizar algunas maniobras difíciles en el aire, pero existen requisitos previos para realizar estas difíciles maniobras. Según la normativa, la acción de descenso del bombardero B52 sólo puede realizarse a gran altura. Sin embargo, para mostrar sus habilidades de conducción, los pilotos estadounidenses hicieron todo lo posible para mostrar sus operaciones, que no sólo perjudicaron a sus camaradas, sino que también les costaron sus propias vidas. La ganancia supera la pérdida.
Y para un país, los pilotos no tienen precio.
Si quieres formar a un piloto cualificado, debes pasar por una serie de controles estrictos. Al final, muy pocas personas pueden quedarse. Por lo tanto, al país le llevará al menos 10 años formar a todos los pilotos cualificados. El espectáculo aéreo estadounidense en la Base Fairchild perdió directamente a tres pilotos as, lo cual fue demasiado costoso.