¿Cómo freír patatas chips para que queden riquísimas?
1. Comprar unas patatas grandes y de piel lisa, lavarlas, pelarlas, cortarlas en tiras, rodajas o bloques, remojarlas en agua con sal durante media hora aproximadamente, escurrirlas y luego blanquearlas en una olla con agua hirviendo. De 1 a 3 minutos, luego saca y escurre el agua, mete en una bolsa plástica y mete en el congelador por unas 2 horas. Las patatas se congelan completamente y luego se fríen.
2. Vierta el aceite en el cárter y caliéntelo a 130 grados, que es aproximadamente el 40% del calor. Cuando las patatas estén fritas hasta que cambien ligeramente de color las sacamos. Luego, cuando la temperatura del aceite alcance los 180 grados, que está un 60% caliente, puedes volver a sacar las patatas y freírlas hasta que estén doradas.
De esta forma, tras dos salazones, congelación y fritura en caliente, las patatas quedarán crujientes.