La piel se vuelve roja y luego negra cuando se salpica aceite mientras se cocina. ¿Por qué preocuparse?
Cuando la piel se salpique con aceite caliente, se deben remojar o enjuagar las manos en agua fría lo antes posible. Sólo así el aceite podrá flotar en agua fría inmediatamente sin transferir la alta temperatura del aceite a nuestros brazos. Como todos sabemos, el calor se transfiere de objetos de alta temperatura a objetos de baja temperatura. Si las manchas de aceite se limpian a tiempo, el daño a nuestra piel se reducirá, pero si las manchas de aceite no se limpian a tiempo, es muy probable que estos aceites de alta temperatura sigan dañando nuestra piel.
Después del lavado, notaremos que las molestias en la piel se reducen mucho. Séquese las manos con una toalla y aplique ungüento de eritromicina. Debido a que la pomada de eritromicina tiene un fuerte efecto antibacteriano y antiinflamatorio, la piel quemada se encuentra en un estado necrótico. Si no se atiende a tiempo, es probable que se produzcan manchas oscuras o rojas, que se verán feas. El ungüento de eritromicina puede inhibir muy bien esta situación, reducir la inflamación y aliviar el dolor a tiempo y reducir la invasión bacteriana.
Así que la próxima vez que nos quememos las manos con aceite, debemos remojarlas o enjuagarlas con agua fría inmediatamente para que la piel esté más sana. Después del lavado, asegúrese de secar el agua suavemente y luego aplique una gran cantidad de ungüento de eritromicina en el área quemada. Esto ayudará a que se formen costras y evitará el enrojecimiento negro y la hinchazón de la piel.