Aumenta el daño de las plantillas
2. Cambios en la marcha: Agregar plantillas interferirá con la marcha normal y hará que caminar no sea natural, afectando así la coordinación y estabilidad del cuerpo.
3. Distensión de los músculos lumbares: dado que el agrandamiento de la plantilla cambia la forma en que el pie contacta con el suelo, el uso prolongado provocará una tensión desigual en la cintura, aumentará la carga en las articulaciones de las rodillas y los músculos de la cintura, y provocar distensión de los músculos lumbares.
4. Deformación del pie: El uso prolongado de plantillas que aumentan la altura, especialmente aquellas con un diseño inadecuado, provocará cambios en la estructura del pie, como deflexión del pie o carga del centro hacia adelante, lo que provocará dolor al caminar, incluso hinchazón y sensibilidad local.
5. Daño a los ligamentos de la articulación: Agregar plantillas ejercerá una presión adicional sobre la articulación de la rodilla, especialmente durante el ejercicio. Esta presión adicional puede causar daño a los ligamentos de la articulación de la rodilla.
6. Circulación sanguínea obstruida: Aumentar el grosor de la plantilla restringirá la circulación sanguínea en los pies, provocando entumecimiento u otras molestias en los pies.
7. Problemas e infecciones de la piel: Un material de plantilla deficiente y una transpirabilidad deficiente provocarán sudoración excesiva en los pies, aumentarán el riesgo de eccema en la piel, dermatitis y otros problemas, y también aumentarán las posibilidades de infección por hongos.