Red de conocimiento de recetas - Recetas gastronómicas - Muchas familias se han visto afectadas. ¿Cuáles son las formas incorrectas de almacenar el té?

Muchas familias se han visto afectadas. ¿Cuáles son las formas incorrectas de almacenar el té?

El pueblo chino ha celebrado una ceremonia del té durante mucho tiempo, por lo que la cultura del té tiene la historia de desarrollo más larga en China, y el té también es un cultivo económico importante en China. Hoy en día, a cada vez más personas les gusta beber té, pero saben poco sobre el método de almacenamiento del té, lo que resulta en métodos de almacenamiento incorrectos.

Mito 1. Trate de minimizar el almacenamiento de hojas de té en ambientes húmedos, con altas temperaturas y luminosos. El té terminado generalmente está seco, pero una vez que absorbe la humedad del aire, se deteriorará y se humedecerá. Aunque el sabor no se nota fácilmente en un corto período de tiempo, se deteriorará después de más de 3 meses, lo que dará como resultado un sabor muy pobre.

Malentendido 2: Minimizar el almacenamiento de té y otros artículos. Las hojas de té son particularmente adsorbentes. Si se coloca junto con otros elementos malolientes, otros sabores se conectarán en serie, lo que hará que el té pierda su aroma original y cambie el sabor al beberlo.

Mito tres. Trate de evitar el uso de recipientes con aberturas grandes o mal sellados para servir té. Acabo de describir las características del té, que son fáciles de oler y humedecer. Por lo tanto, durante el uso del té, si se abre y se vuelve a cerrar cada vez, se deben realizar trabajos de sellado. Además, es mejor utilizar bolsas de papel de aluminio y latas para almacenar el té herméticamente.

Mito 4. Intenta evitar no terminar el té mucho tiempo después de abrirlo. Si a la mayoría de las personas les gusta beber té, se terminarán una lata de té rápidamente, pero si no beben demasiado, o si algo los retrasa, lo beberán rápidamente. Se recomienda que después de abrir el té y usarlo durante más de tres meses, se selle y se almacene en la capa de conservación del refrigerador.

Solo reduciendo los cuatro malentendidos anteriores podremos asegurarnos de que el té no se deteriore y tenga un sabor consistente.