¿Qué tipo de almohada deben utilizar los niños en verano?

Una almohada demasiado blanda ejerce presión sobre el cuero cabelludo en un área grande, no favorece la circulación sanguínea y no brinda un buen soporte al cráneo y a la columna cervical. Por el contrario, no favorece el desarrollo esquelético del niño. Y en el caso de los bebés y niños pequeños, una almohada demasiado blanda puede hacer que el niño entierre la cabeza en ella mientras duerme, provocando asfixia.

La almohada de trigo sarraceno ayudará a tu hijo a dormir mejor.

Debido a las características de la cáscara de trigo sarraceno, tiene cierto grado de fluidez y puede cambiar de forma a medida que el niño cambia de postura mientras duerme, por lo que puede soportar uniformemente los huesos de la cabeza y el cuello del niño. Almohada de cáscara de trigo sarraceno. Tiene buena transpirabilidad y es adecuada para su uso en todas las estaciones. El largo de la almohada debe ser igual o ligeramente más ancho que el ancho de los hombros del niño, y la almohada no debe ser demasiado alta, de 3 a 5 cm es suficiente. Lo mejor es utilizar algodón suave para las fundas de almohada para garantizar la transpirabilidad y la comodidad. Cabe recordar que debido a que los niños tienen un metabolismo fuerte y sudan mucho en la cabeza, las almohadas se remojan fácilmente cuando duermen, por lo que es mejor preparar dos almohadas para que las usen los niños y secarlas cada dos días.