¿Cuáles son las ventajas o desventajas de comer más lechuga y brotes de bambú?
La lechuga puede mejorar la función del sistema digestivo. Debido a que su sabor es fresco y ligeramente amargo, puede estimular la secreción de enzimas digestivas y aumentar el apetito. La lechuga contiene una gran cantidad de fibra, que puede promover la peristalsis de la pared intestinal humana y prevenir el estreñimiento. La pulpa de suero de la lechuga puede mejorar la secreción de jugo gástrico, las glándulas digestivas y la bilis, y puede ayudar rápidamente al cuerpo a excretar heces, toxinas y gases turbios, limpiando así los intestinos, perdiendo peso y perdiendo peso.
La lechuga tiene las funciones de hidratar el cabello, diuresis y favorecer la lactancia. El contenido de potasio en la lechuga es mucho mayor que el de sodio, lo que puede promover la micción y mantener el equilibrio hídrico. La lechuga también favorece la lactancia. Según el "Compendio de Materia Médica", Li Shizhen una vez mezcló lechuga con vino y la decocó en agua para tratar la obstrucción de la lactancia posparto. Las personas que sufren pérdida de cabello debido a una deficiencia de potasio a menudo comen lechuga para que su cabello se vuelva negro, grueso y suave.
El flúor que contiene la lechuga puede participar en la formación del esmalte dental y la dentina y en el crecimiento de los huesos. Además, la lechuga también contiene hierro, calcio y otros minerales, muy beneficiosos para la dentición y la dentición de los niños. El alto contenido de yodo en la lechuga es beneficioso para el metabolismo básico del cuerpo, el desarrollo físico y mental y la regulación emocional. Por tanto, la lechuga tiene un efecto sedante y su consumo regular puede ayudar a aliviar la tensión y favorecer el sueño.