¿Qué es bueno comer para el insomnio y qué alimentos se deben comer con más frecuencia?
1. Kiwi
¡Un último estudio muestra que comer dos kiwis al día puede mejorar la calidad del sueño en un 40%! La aparición de trastornos del sueño está relacionada con una excitación excesiva del sistema nervioso central, una sobreestimulación simpática o una secreción excesiva de hormonas provocada por el estrés. El kiwi es rico en calcio, magnesio y vitamina C, lo que ayuda en la síntesis y transmisión de neurotransmisores. Además, también contiene calcio, extremadamente raro en otras frutas, que tiene el efecto de estabilizar el estado de ánimo e inhibir los nervios simpáticos.
2. Plátano
El conocido plátano para adelgazar es en realidad una buena “pastilla para dormir”. Además de estabilizar la serotonina y la melatonina, también tiene un efecto relajante muscular. de magnesio. Además, comer plátanos antes de acostarse no provoca aumento de peso, es bajo en calorías, es rico en fibra dietética y favorece la defecación.
3. Longan
Comer fruta por la noche no es bueno para la digestión y, debido a que la fruta contiene demasiada azúcar, puede provocar fácilmente un exceso de calorías y provocar obesidad. Especialmente si comes frutas con alto contenido de fibra antes de acostarte, un tracto gastrointestinal lleno afectará tu sueño. Para las personas con una función gastrointestinal deficiente, es aún más perjudicial para la salud. Pero si no duermes bien, puedes comer unos cuantos longan. Tiene el efecto de calmar los nervios y favorecer el sueño, haciéndote dormir más profundamente.
4. Mijo
El mijo es el más rico en triptófano entre todos los cereales. Sería una buena idea añadir un poco de mijo al alimento básico de la cena, lo que ayudará a aumentar la cantidad. de triptófano que ingresa al cerebro. Cantidad de aminoácidos. La medicina tradicional china cree que tiene los efectos de fortalecer el bazo, armonizar el estómago y dormir bien. Cómo comer: tomar una cantidad adecuada de mijo, añadir agua para cocinar las gachas y comerlas en la cena o antes de acostarse.