Me multaron por comer dulces en el metro. Escribe un ensayo argumentativo al respecto.
La Sra. Wang, a quien multaron con 20 yuanes por comer dulces, se sintió ofendida. Mucha gente también se quejó por la Sra. Wang. Comer un caramelo no tiene sabor y nunca afectará a los demás. Estas multas son injustas, mientras que algunas personas creen que comer dulces o durian debería cumplir con las normas del metro. Por supuesto, también nos recuerda a la "niña de las garras de pollo" que se negó a admitir sus errores a principios del nuevo año 2016. Asimismo,
Creo que el motivo principal es la multa. La Sra. Wang no arrojó envoltorios de dulces ni comió dulces con un olor especial, pero fue multada con 20 yuanes. La chica de las garras de pollo no solo escupió huesos de pollo con indiferencia, sino que también comenzó a "discutir" con los pasajeros. Al final, Metro no la multó y se negó a admitir su error ni a disculparse. Sin duda, esto da a la gente la ilusión de "recoger y pellizcar el caqui". De hecho, ya sea que comas durian, panqueques, cebolletas o azúcar, es imprescindible en el metro. Obviamente, no es razonable dejar ir a quienes comen cajas de puerros. Esto también hará que los pasajeros se sientan desequilibrados y les impedirá establecer la majestuosidad de las reglas del metro, y mucho menos lograr el efecto de servir al público. Por eso el metro debe dar ejemplo. Como las multas deben ser "iguales", no puede haber multas selectivas.
Además de igualdad en las multas, hablemos de si se debe multar al azúcar. En primer lugar, la pena de ayunar en el metro no es un flagelo, pero como la legislación se ha convertido en una conclusión inevitable, es necesario estudiar detenidamente el espíritu de aplicación de la ley. En segundo lugar, el metro es un espacio público relativamente estrecho y cerrado con una alta densidad de gente. Si cada uno sigue su camino y come lo que quiere, "come como un cerdo".
Entonces, comer dulces es lo mismo que comer patas de pollo. Si las ratas se sienten atraídas para dañar las instalaciones del metro, nadie puede asumir la responsabilidad. Así que ten cuidado con todo lo que comes.
Por supuesto, debería haber más publicidad en el metro. Publicar más advertencias en lugares visibles y transmitir más recordatorios por radio puede, naturalmente, evitar que los pasajeros sean multados sin saberlo. Los gestores también pueden habilitar una "zona de comedor" en la zona de espera fuera del metro, proporcionando mesas y sillas para facilitar a los pasajeros con problemas de salud o que no hayan comido. Es necesario aplicar estrictamente la ley y considerar la situación real de los pasajeros. Además, los agentes del metro también pueden dar una advertencia primero y luego imponer una multa.