Introducción a la alimentación saludable
La digestibilidad y la ligereza son las reinas.
La primera opción para cenar es comida ligera y fácil de digerir. Puede probar alimentos semilíquidos como sopa en rodajas, wonton, fideos, albóndigas, leche y pasteles. Piensa un poco a la hora de cocinar y corta las verduras y la carne en trozos pequeños. Las bolas de arroz glutinoso que hagas deben ser "pequeñas", que no sólo sean deliciosas sino también fáciles de digerir. Recuerde, no se vaya a la cama inmediatamente después de cenar, ¡dale tiempo a la comida para que se digiera!
Gasolinera Vitamin
¡Atención trabajadores del turno de noche! La vitamina A te ayuda a adaptarte a la luz tenue y a prevenir la fatiga visual. Consuma más carne magra, pescado, hígado de cerdo, zanahorias y otros alimentos ricos en vitamina A. La vitamina C puede aliviar la fatiga y mejorar la resistencia. Consuma más frutas y verduras frescas. Además, los suplementos de vitamina D te ayudarán a evitar la deficiencia de calcio. Los huevos, el pescado y la leche son buenas opciones.
La cantidad justa, no demasiada.
Los snacks nocturnos no son comidas, por lo que hay que controlar la cantidad y las calorías. Sólo come cuando no tengas demasiada hambre, no comas demasiado. Una gran porción de comida puede parecer abundante, ¡así que opte por porciones más pequeñas de algo delicado!
Aléjate de la obesidad y come snacks saludables.
Los alimentos fritos y ricos en grasas por la noche son insoportables para el estómago. Difícil de digerir y afecta el sueño. La carne es buena, pero no te excedas. Comer demasiada carne antes de acostarse provocará un exceso de calorías, una gran carga para el tracto gastrointestinal y una mala calidad del sueño. A la larga, también puede provocar obesidad, cálculos biliares y otros problemas.