Red de conocimiento de recetas - Tipos de cerveza - ¿Cuál es el plato “más cursi” para tomar con vino? ¿Sabías?

¿Cuál es el plato “más cursi” para tomar con vino? ¿Sabías?

¿Cuál es el plato más cutre para acompañar una bebida? ¿Sabías?

Todo el mundo debe estar familiarizado con los platos que acompañan a las bebidas, como orejas de cerdo, cacahuetes, etc. Todos ellos son platos imprescindibles en casa. Por eso, cuando bebemos, hay uno de los platos más cutres para acompañar el vino. ¿Sabes cuál es? Muchos amigos pueden decir que el plato más cutre para acompañar el vino son los cacahuetes. Pero no lo es. También dijiste que aunque el aperitivo no sea comida, son clavos de hierro. Si somos buenos observando atentamente las pequeñas cosas que nos rodean, descubriremos que algunas personas ni siquiera pueden permitirse el lujo de beber cerveza. Estas historias suelen suceder en la época de la generación mayor. En aquella época, si no tenías dinero en el bolsillo, todavía querías beber. Entonces tendrán todo el dinero que tengan y comprarán una botella de vino. Pero el vino por sí solo no es suficiente sin la comida que lo acompaña. Pero no tengo dinero extra, ¿qué debo hacer ahora? Un borracho inteligente pensará en una manera. Suelen buscar clavos a lo largo del sitio de construcción. Lo mejor es utilizar clavos oxidados, porque cuando los clavos están oxidados, tendrán un olor a óxido. Suelen recogerlos y llevárselos cuando beben. Una vez que te quedes sin comida y bebida, saca los clavos de hierro. Especialmente el tipo de clavos de hierro que se enseñan en los días de lluvia, saben mejor. Debido a que la lluvia empapa los clavos de hierro, hará que los clavos de hierro huelan más. De esta forma, los borrachos se rascarán las uñas de hierro mientras beben. En realidad, el efecto es beber. No es para su uso, este método parece lamentable e impuro, pero para ellos es un tipo de diversión que es difícil de entender para los demás. Los borrachos sólo experimentan felicidad cuando beben. Para ellos, con el vino todo es posible. Por tanto, la costumbre de rascarse los clavos de hierro siempre se transmitirá de generación en generación. Hasta ahora, aunque son pocas las personas que lo hacen de esta forma. Pero todavía vale la pena recordar este plato tan cutre para acompañar el vino. ¿A qué crees que sabe con un vino como este?