¿Es perjudicial para el cuerpo si vomito después de beber demasiado?
Desventajas de beber vómitos:
1. Por un lado, consume la energía saludable, por otro lado, también daña las mucosas del estómago, esófago y garganta, causando inflamación en las partes correspondientes, lo que a su vez provoca que el ácido del estómago pueda quemar la garganta, aumentar el riesgo de cáncer de garganta y provocar sangrado estomacal.
2. Comer antes de beber es para reducir el daño al estómago. Las cosas vomitadas han estado en el estómago y contienen ácido gástrico. El vómito tendrá un efecto corrosivo en el esófago humano.
Efectos positivos de los vómitos después de beber:
1. Vomitar después de beber es un reflejo fisiológico normal del ser humano, y el cerebro es el centro para controlar los vómitos. Cuando la mayoría de las personas reciben estimulación en la faringe o el tracto gastrointestinal, los vómitos pueden ser causados por transmisión nerviosa al cerebro. En este sentido, el vómito en sí es también una respuesta protectora.
2. Los vómitos después de beber alcohol reducen la cantidad de etanol a descomponer, lo que acelera el tiempo para despertar. Información ampliada
Los efectos letales del alcohol son los siguientes
(1) Asfixia por intoxicación por alcohol y coma han perdido la función de autoprotección si están en decúbito supino o vomitan. bloquea las vías respiratorias, puede provocar la muerte por asfixia y falta de oxígeno.
(2) Inducir enfermedades cardíacas El alcohol puede inducir espasmos de las arterias coronarias y arritmias malignas, que pueden provocar muerte cardíaca súbita.
(3) Inducir una hemorragia cerebral. El alcohol puede excitar los nervios simpáticos, provocando un aumento brusco de la presión arterial, lo que a su vez puede provocar una hemorragia cerebral. Según las estadísticas, en mi país mueren cada año 110.000 personas por hemorragia cerebral provocada por el alcoholismo, lo que representa el 1,3% del total de defunciones.
(4) Otras bebidas alcohólicas pueden inducir pancreatitis, coma hipoglucémico, trastornos metabólicos, etc., todos ellos relacionados con la muerte del paciente.