¿Qué tan malo puede ser el "niño travieso" que te rodea?
Por cada adulto, le tiene miedo a un grupo de personas. Mientras este grupo de personas aparezca ante sus ojos, estarán confundidos. Para decir qué es este grupo de personas, en realidad son los niños traviesos de los que hablamos a menudo. Sólo quien lo ha visto puede saber lo malo que es un niño travieso. He visto a varios niños traviesos antes. Por ejemplo, les gusta tirar cosas, pellizcar huevos y a algunos incluso les gusta abofetear, etc. Déjame presentarte lo traviesos que son los niños traviesos que me rodean.
1. Le gusta tirar cosas
El niño travieso de mi hermana pequeña tiene más de dos años. Cuando vino a mi casa a jugar, tenía la cabeza grande. que tira cosas. Viene a mi casa y tira cosas por toda la casa. Cuando quieres encontrar algo, difícilmente lo encuentras al verlo tirando cosas constantemente, realmente no puedes golpearlo ni regañarlo.
2. Triturar huevos
El niño travieso de la casa de mi hermana mayor tiene una costumbre realmente aterradora, no importa a quién vaya, siempre abriré el frigorífico para buscar huevos. Luego hago todo lo posible para exprimirlos. Cuando se aplasta un huevo, su sensación de victoria hace que la gente se pregunte qué pasó con este niño. Durante el período pico en mi casa, pellizqué 21 huevos de una sola vez. La cocina me hizo difícil sacarlos y él estaba cubierto de claras o yemas de huevo. Al ver esto, tenía muchas ganas de llorar.
3. Bofetadas
El hijo de mi amigo no goza de buena salud. Nació con una cardiopatía congénita y no puede ser estimulado en absoluto. Sin embargo, la pareja no tomó en consideración al niño cuando miraba televisión y el niño aprendió a abofetear sin saberlo. Por eso, si no tengo cuidado en la vida, me gusta abofetear a los demás. Si una bofetada no es suficiente, a veces puedo abofetear cinco, seis, siete u ocho, lo que hace que la gente se vuelva loca con solo pensarlo.
Ante un niño travieso, no está bien pegarle en ocasiones, ni tampoco regañarle. Como él tiene su propia inocencia, no podemos enredarnos demasiado en ella. Pero, ¿qué tan malo es un niño travieso? Sólo cuando lo experimentes tú mismo descubrirás si este niño nunca crecerá.