¿Por qué a la gente le gusta tomarse selfies?
En primer lugar, todos esperamos ser reconocidos y permitidos por los demás. Tomarse selfies es un proceso de autofortalecimiento y reconocimiento. Porque esta sensación de satisfacción hace que la gente se sienta bien. Cada vez que me maquillo, cambio de peinado o subo una selfie, quiero que más personas aprecien y reconozcan mi actuación. Es como volver al estado mental de un niño ansioso por llamar la atención de los demás.
En segundo lugar, si se supera el límite de selfies, se trata de una especie de enfermedad. Las personas tienden a preocuparse más o menos por sí mismas, lo que también se llama "narcisismo". Esta tendencia es demasiado fuerte. La adicción a las selfies es, sin duda, un narcisismo patológico y una manifestación del trastorno obsesivo-compulsivo. Si persigues demasiado esta sensación de satisfacción, si te tomas una selfie sin recibir comentarios favorables de los demás o si tus amigos te gastan bromas, te abuchearán una y otra vez. Este tipo de brecha interior puede fácilmente llevarte a pensar en extremos si no obtienes la satisfacción que deseas.
Por supuesto, los dos puntos anteriores son para personas que se toman selfies. No hay nada de malo en tomarse algunas selfies de vez en cuando para aumentar la confianza en uno mismo y entretener a los demás y a usted mismo.
No es fácil deshacerse de los grilletes de la cámara de belleza. Esto requiere que fortalezcamos nuestra comprensión de nosotros mismos. En la vida diaria, no podemos confiar únicamente en las selfies para obtener el reconocimiento y el elogio de los amigos que nos rodean. Debemos ser modestos, aprender a ajustar nuestro estado mental y reducir nuestra dependencia de las redes virtuales. Publicar selfies tuyos durante mucho tiempo tendrá el efecto contrario y te alejará de los amigos que te rodean.
Las mujeres se complacen a sí mismas. Sin embargo, la mayoría de las mujeres aman la belleza y son vanidosas, por eso debemos aprender a controlar nuestra vanidad tanto como sea posible. A veces, lo que nos preocupamos de nosotros mismos puede no ser necesariamente lo que les importa a los demás.
Si podemos utilizar nuestra ansiosa atención al mundo virtual para enriquecernos, o leer, dibujar, escribir, aprender a bailar, hacer yoga, hornear, arreglar flores o alfarería... Descubrirás que hay muchas cosas más significativas en este mundo que tomar selfies.
Como ser humano, la cara es, por supuesto, importante, pero tu verdadera habilidad es más importante.