¿Por qué mucha gente piensa que cocinar con leña es mejor que usar cocinas de inducción o de gas?
Porque la temperatura de combustión de la leña es ligeramente inferior a la de nuestras estufas de gas domésticas. Además, se utiliza leña para cocinar y el fondo de la olla se calienta de manera uniforme.
Tenemos una larga historia en el uso de leña, lo que lleva a que nuestras recetas actuales se cocinen para este calor.
De esta forma el tiempo de combustión es mayor y el calentamiento es más uniforme. Entonces tiene un sabor más natural.
Por supuesto, otra gran razón es el olor único de la leña quemada. No sé si hay alguna investigación científica que confirme si tenemos este hábito, pero huelo el fuego de leña cocinándose, y aunque no lo veo, tengo ganas de comerlo.
Quizás sea porque las plantas quemadas tienen un olor especial, y los humanos se han vuelto dependientes de este olor durante el proceso de evolución. Por supuesto, prefiero el olor de la leña cocinada, no el olor de un bosque en llamas.