Red de conocimiento de recetas - Recetas occidentales - ¿Por qué la gente suele decir "9 de cada 10 empresas inician un negocio y mueren"?

¿Por qué la gente suele decir "9 de cada 10 empresas inician un negocio y mueren"?

¡El espíritu empresarial es un escape por los pelos! El espíritu empresarial requiere conocimiento de las tendencias de desarrollo social y económico, comprensión de los productos industriales y las capacidades de innovación, comprensión de la producción, el marketing y la gestión, y comprensión de la naturaleza humana y las relaciones comerciales. Esto sólo lo pueden hacer las personas más inteligentes, pero hay demasiadas personas inteligentes.

1. ¿Cuál es la intención original al iniciar un negocio? ¡Simplemente resuelve el problema! La mayoría de los empresarios intentan ganar dinero recaudando dinero. Puede que comprendan la tecnología, las finanzas y la gestión de la producción, pero no conocen el sentido común económico más básico: el espíritu empresarial es ayudar a otros a resolver problemas no resueltos, y el dinero es sólo la recompensa después de resolver el problema. A la mayoría de las personas sólo les importa cuánto dinero pueden ganar, pero ignoran el valor del producto, que es la capacidad del producto para resolver problemas.

2. Emprender no es un pequeño negocio para sustentar a una familia. El emprendimiento es una carrera. Lo que el espíritu empresarial requiere no son fondos, tecnología y talentos, sino comprender las tendencias futuras del desarrollo social y luego prepararse con anticipación y esperar a que llegue esta oportunidad. Al iniciar un negocio, no debes ponerte al día con la tendencia, de lo contrario, cuando llegue la tendencia, serán los cerdos los que volarán hacia el cielo, y después de la tendencia, seguirán siendo los cerdos los que morirán. Si nos fijamos detenidamente en aquellos que iniciaron sus negocios hace unos años, todavía hay unos pocos que no han quebrado hoy.

3. En la era digital, el emprendimiento significa que cuanto mayor es la inversión, mayor es la tasa de fracaso; cuanto menor es la inversión, mayor es la tasa de éxito. Ésta es la ley de hierro del espíritu empresarial. El espíritu empresarial requiere la capacidad de resolver problemas y crear valor, ¡no dinero! Si inicia un negocio por dinero, el resultado final será la quiebra o incluso grandes deudas.