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¿Por qué las alitas de pollo siempre se sirven con apio y queso azul?

La combinación de alitas Buffalo y apio ha estado plagando tanto las fiestas de los viernes por la noche como las del Super Bowl. ¿Por qué combinar nuestra verdura más ligera con alitas de pollo podridas y empapadas de grasa?

Esta es una pregunta necesaria. Hay sobras.

Ya en 1964, en Buffalo, Nueva York, Frank y Teressa Bellissimo se enfrentaron a las peticiones nocturnas de su hijo adulto, Dominic, para que comieran algo para él y sus amigos en Moss's. Barra de anclaje en Baileys. Para satisfacer su apetito, Teresa preparó algunas alitas, margarina y salsa picante, lo que desató una obsesión por las alitas de pollo en la región y en todo el país. Sin embargo, los residentes de Buffalo no llaman alitas de pollo alitas de pollo más de lo que los franceses llaman papas fritas a las papas fritas. Simplemente las llaman alitas de pollo o alitas de pollo. )

Teresa completó la primera ala con sus cosas de la barra. Ella prepara alitas con aderezo casero de queso azul y palitos de apio sobrantes de una ensalada de antipasto. Dominic y sus amigos comieron y la combinación se mantuvo.

Cuando Theresa utilizó lo que tenía disponible, resultó que eligió algunas parejas muy complementarias. El alto contenido de agua y la textura crujiente del apio proporcionan el contraste perfecto con la sal y la grasa de las alitas de pollo. Proporciona un descanso refrescante e hidratante, especialmente cuando su consumo llega a las decenas. Y como son fáciles de digerir, no interferirán con la bomba termonuclear que ya está explotando en tu vientre.

Algunos amantes de las alitas eligen el aderezo ranch en lugar del queso azul. Si bien cualquiera de los dos tiene suficiente cremosidad para aliviar la quemadura de la salsa picante, los lugareños de Buffalo consideran que el rancho es una maldición. En 2018, Frank's Red Hot era la salsa preferida de Teresa para preparar alitas en su primer libro de cocina. Recomendó por error el rancho en las redes sociales, lo que provocó un virtual colapso. Imagínense lo que pasaría si sugirieran zanahorias.