¿Por qué no recomiendas que los estudiantes tengan hámsteres en lugar de hámsteres?
Los hámsters no tienen parientes y les resulta difícil desarrollar sentimientos. A veces muerden a las personas y son animales solitarios. Encerrados en una jaula, la probabilidad de canibalismo es alta, lo que tendrá un impacto psicológico en los estudiantes y resulta inconveniente sacarlos a jugar. El hámster es demasiado pequeño para observar su salud y, una vez que escapa, es difícil ver por dónde salió.
Los parientes de la sepia son muy interactivos, pueden subirse a los hombros y se les puede sacar a jugar. Además, las sepias son animales sociales y muy amigables con los de su propia especie, e incluso pueden sufrir depresión debido a la soledad. Las ratas rayadas son grandes, vivaces y fáciles de observar por su salud, y no son fáciles de encontrar debajo del sofá.