¡Mi madre está cocinando en casa al mediodía! ¡Escribe un ensayo de 400 palabras para agradecerte!
Recuerdo aquella vez que mi madre insistió en dejarme aprender a cocinar. Le dije a mi madre: "¿Está bien si no aprendo?". Mi madre gritó severamente: "No". La primera vez mi madre me enseñó a cocinar huevos revueltos con tomate, lo que me dijo: "Primero corta un tomate y ponlo en un bol, y luego ponle un poco de sal". Sacó un huevo del cajón y lo puso sobre la mesa, lo golpeó ligeramente y vio que el huevo se partió. Lo puso encima del bol y lo rompió. La clara y la yema cayeron al bol. "plop" y lo recogió. Un par de palillos lo removieron y lo pusieron nuevamente sobre la mesa. Mamá levantó el balde de aceite sobre la mesa, vertió un poco de aceite en la cuchara y lo puso en la estufa. Mientras queden pequeñas burbujas amarillas en el aceite, el aceite estará cocido. Coge el bol con los huevos batidos y viértelo en la cuchara. Al cabo de un rato los huevos estarán cocidos. Finalmente estuvo listo y estaba a punto de darle un mordisco cuando mi madre me dijo: "Ven aquí y aprende a hacer tomates fríos". Por desgracia, ya sabía cómo hacer tomates para ensalada, pero mi madre todavía me pidió que aprendiera a hacerlo con él. No tuve más remedio que obedecer los arreglos de mi madre y seguir sus instrucciones para terminarlo.
A mi madre le encanta cocinar y es buena cocinando, pero no me ha hecho ningún favor.