Escalfar los caracoles en agua fría o hirviendo.
Los caracoles generalmente se hierven cuando se cocinan.
Esto asegura que la temperatura del agua sea alta y que la carne del caracol se pueda cocinar rápidamente. Al mismo tiempo, el agua hirviendo también puede esterilizar eficazmente, reducir la vitalidad de las bacterias y hacer que los platos sean más higiénicos.
Pero a algunas personas les gusta utilizar agua fría en la olla para asegurarse de que la carne del caracol no se ablande demasiado.
No importa qué agua uses para cocinar, debes prestar atención al control de la temperatura del agua.