Hay muchos salones ancestrales en las zonas rurales. ¿Son estas supersticiones feudales?
Cada vez que entro al salón ancestral de mi casa, siempre está oscuro y da miedo. Nunca nos atrevíamos a hablar ni a mirar a nuestro alrededor. De todos modos, lo encontramos misterioso.
La función más importante de los salones ancestrales del pueblo es la celebración de eventos importantes como los eventos rojos y blancos. No importa cómo vivan o mueran todos los habitantes de la aldea, el salón ancestral es el destino final y el único camino a seguir.
Junto con algunas prácticas supersticiosas feudales rurales, esos eventos rojos que pasan por muchos procedimientos, especialmente los eventos blancos, y esos sacerdotes taoístas que cantan de enero a octubre, añaden un encanto infinito a estas casas antiguas.
2. Las casas antiguas son una especie de nostalgia. Esas casas ancestrales en ruinas del pueblo tienen demasiados anhelos por nuestros viejos amigos. Con la construcción de nuevas zonas rurales y la mejora del nivel de vida de la población rural, muchas casas antiguas han sido demolidas y reconstruidas. Pero mientras permanezcan, las casas antiguas de estos pueblos tendrán un significado muy especial para las generaciones futuras.
Este es un lugar donde podemos depositar nuestros pensamientos interminables en nuestros viejos amigos. Mi abuela, que murió hace veinte años, y mi madre, que murió hace más de diez años, fueron al cielo en esos antiguos salones ancestrales. Mi abuelo murió joven y no lo he visto desde que nació.
Muchas casas antiguas existentes en zonas rurales se han transmitido de generación en generación durante décadas o incluso cientos de años. No fuimos testigos de su nacimiento y es posible que no veamos necesariamente su futuro.
Estas casas antiguas provienen de la antigüedad, de la historia y de la mirada de los antepasados. Muchos de ellos están abandonados, pero cada vez que camino por esos lugares pienso en mi abuela y mi madre que fallecieron hace mucho tiempo, y en mi abuelo a quien nunca he conocido.
3. La casa antigua es una especie de recuerdo. La risa de jugar al escondite cuando era niño todavía resuena en mis oídos. Para mí, que nací y crecí en el campo, la casa vieja sigue siendo un lugar lleno de puerilidad.
Cuando era niño no había nada que hacer en el campo. A diferencia de los niños de hoy, ellos pueden deslizarse, agarrarse de las barras paralelas y montar en un caballito. En esa época, todos los días después de la escuela, a un grupo de niños le gustaba correr a la vieja casa y esconderse y buscar.
Cada casa antigua está conectada entre sí, desde el salón ancestral hasta el exterior, construida capa por capa. Entre las casas, caminos sinuosos se extienden en todas direcciones, girando de este a oeste como un laberinto, lo que dificulta a los forasteros encontrar la salida. Incluso en este pueblo algunos jóvenes entraban pero no sabían cómo salir.
Ahora que hemos crecido y nos hemos ido a otros lugares a ganarnos la vida, las casas antiguas de nuestro pueblo natal y de las zonas rurales se han convertido en una especie de nostalgia para nosotros que viajamos lejos. No importa qué tan lejos viaje o cuánto dinero gane, siempre habrá nostalgia por su ciudad natal.
Cada vez que estoy cansado del trabajo, cada vez que encuentro quejas, cada vez que encuentro contratiempos y problemas, no puedo evitar pensar en los amigos con los que una vez jugué en el pueblo y en las casas antiguas en capas. , mi amable y encantadora abuela, y mi madre que ha trabajado duro toda su vida...