Apareciendo durante la epidemia
Quedarse en casa durante mucho tiempo inevitablemente hará que las personas se sientan inquietas, irritadas por asuntos triviales e incapaces de controlar su temperamento. Me preocupa que el virus llegue a mí y a personas que conozco bien en cualquier momento.
2. Sospecho que estoy enfermo.
Cuando tengo febrícula no me atrevo a ir al hospital por miedo a que me pongan en cuarentena. Me siento asustado e irritado cuando veo varios informes nuevos en los medios. Las condiciones de las personas con enfermedades físicas o mentales pueden empeorar a causa de esta pandemia. Otros se preguntaron si tenían neumonía y fueron al hospital varias veces.
3. Depresión
Durante el período de aislamiento, las personas se sentirán pesimistas, propensas a llorar, falta de energía, mal humor, pérdida de interés, pérdida de apetito o comer en exceso. El tiempo de sueño se acorta o se está acostado en la cama dando vueltas en la cama, sin poder conciliar el sueño y los patrones de sueño se alteran.
4. Trastorno obsesivo-compulsivo
Lavarse las manos repetidamente y desinfectarse periódicamente. Además del pensamiento obsesivo, no pude evitar pensar en las graves consecuencias del nuevo tipo de neumonía.
5. Síntomas físicos
Cuando el estrés mental es demasiado grande, las emociones negativas pueden provocar síntomas físicos, como dolor en una determinada parte del cuerpo, sequedad de boca, fiebre baja, indigestión. , malestar abdominal y apetito. Falta de energía, debilidad general, mareos, etc.
6. Enfermedades relacionadas con el estrés
El estrés emocional excesivo a largo plazo puede inducir problemas multisistémicos. Los principales síntomas del sistema respiratorio son ataques de asma, dolor en el pecho, tos seca, sensación constante de materia extraña en las vías respiratorias, agravamiento del enfisema y bronquitis crónica. Los sistemas endocrino y metabólico se caracterizan por trastornos metabólicos, inestabilidad glucémica y disfunción tiroidea. En particular, puede causar daños graves al sistema cardiovascular, lo que puede aumentar la presión arterial y provocar enfermedades coronarias o infarto de miocardio.