¿Qué frutas son buenas para las personas con enfermedad hepática? ¿Qué frutas no deben comer?
Los pacientes con enfermedades hepáticas cercanas al hígado graso deben comer más frutas bajas en azúcar. Entre las frutas, las ciruelas verdes, sandías, melones, naranjas, limones, uvas, etc., tienen un contenido de azúcar relativamente bajo. Plátanos, granadas, etc., pomelo, naranja, manzana, pera, lichi, mango, etc. son frutas con un contenido medio en azúcar, mientras que los dátiles, frutos rojos, dátiles secos, dátiles confitados, caquis, pasas, orejones, longan, etc. Son frutas con alto contenido de azúcar. Aunque los plátanos son ricos en calorías, son bajos en grasas, te hacen sentir lleno y contienen potasio. Además, los plátanos pueden prevenir la acumulación de grasa debajo de la piel y son muy eficaces para prevenir el hígado graso. verano caluroso, pero debido a que la sandía es un alimento frío, puede dañar fácilmente el bazo y el estómago. Las personas con bazo y estómago fríos, enteritis y gastritis deben comer menos.
¿Qué tipo de frutas son buenas para comer para la enfermedad hepática?
2. Para los pacientes con enfermedad hepática y calor húmedo en el hígado y la vesícula biliar, pueden comer más frías y benignas. Alimentos, porque en el caluroso verano las personas son propensas a sufrir dolores de cabeza, malestares y fiebre, y tienen sed. Comer algunas frutas que reducen la inflamación, como la sandía, puede aliviar el fuego del hígado y aliviar la irritabilidad. porque las naranjas son fáciles de enojar, lo que puede provocar hinchazón y dolor en la garganta.
3. Es mejor que las personas con enfermedades hepáticas y problemas gastrointestinales graves no coman frutas heladas. Pueden elegir algunas frutas benignas o suaves, entre ellas, manzanas, limones, tomates y plátanos. con el estómago vacío. Las personas con problemas gastrointestinales graves no deben comerlas con el estómago vacío. Es mejor que las personas coman menos peras.