¿Por qué las hojas de la gardenia se vuelven amarillas?
1. Alcalinización del suelo
La Gardenia es una planta a la que le gustan los suelos ácidos. Si la tierra para macetas tiene un pH alcalino, es probable que aparezcan hojas amarillas. El suelo y el agua en muchas zonas del norte son alcalinos y tienen un contenido de sal relativamente alto. Crecer en este entorno durante mucho tiempo puede hacer que las plantas se pongan amarillas fácilmente y, en última instancia, afectar la floración.
2. El suelo se ha vuelto duro y hermético.
A Gardenia le gustan los suelos sueltos y transpirables. Si el suelo es demasiado pegajoso o tiene poca permeabilidad al aire, las hojas pueden volverse amarillas fácilmente.
3. Deficiencia de hierro
La Gardenia tiene una alta demanda de hierro. Si carece de hierro, las hojas nuevas de gardenia se volverán amarillas primero y, en casos graves, las venas se volverán amarillas o blancas (el hierro no se transfiere fácilmente, por lo que las hojas viejas generalmente son verdes).
4. Deficiencia de magnesio
Si es deficiencia de magnesio, las hojas viejas se volverán amarillas, luego las hojas nuevas se volverán amarillas y las nervaduras permanecerán verdes.
5. Aplicar demasiado y demasiado espeso fertilizante.
La fertilización generalmente debe ser fina y frecuente. Si aplica demasiado fertilizante o aplica demasiado fertilizante a la vez, fácilmente quemará las raíces, provocará hojas amarillas e incluso la muerte de la planta. Generalmente, la parte superior de las hojas nuevas es marrón y las hojas viejas son marrones y se caen.
6. Riego excesivo
La gardenia no se debe regar con frecuencia para evitar la acumulación de agua, lo que puede provocar la pudrición de las raíces. En este momento, las hojas jóvenes generalmente comienzan a ponerse amarillas, mientras que las hojas más viejas no muestran cambios obvios.
7. Iluminación inadecuada
Pueden aparecer erupciones en determinadas zonas. No se puede dar sombra durante mucho tiempo, de lo contrario a las plantas se les caerán las hojas fácilmente y se volverán amarillas.
8. Congelación
Si la temperatura es demasiado baja, las gardenias también pueden congelarse, provocando que las hojas se pongan amarillas.