La diferencia de eficacia entre el arándano y la ciruela negra
Aperitivo: El arándano seco contiene una cierta cantidad de ácido orgánico, que puede promover la secreción de saliva y ácido gástrico y promover la digestión de los alimentos, por lo que tiene un buen efecto apetitoso. Un consumo adecuado puede aumentar el apetito y es adecuado para personas que no tienen apetito y no quieren comer.
Mejora de la inmunidad del cuerpo: El arándano seco es un alimento rico en nutrientes, que contiene una gran cantidad de vitamina C y caroteno, además de algunos azúcares naturales e ingredientes ácidos. Estas sustancias pueden promover la regeneración de las células inmunes en el cuerpo humano y mejorar la inmunidad humana. El consumo regular puede prevenir algunas enfermedades comunes.
Promueve la digestión: El arándano seco puede favorecer la digestión. No sólo es rico en ingredientes ácidos, sino que también puede promover la secreción de jugos digestivos como la saliva y el jugo gástrico. La fibra que contiene también puede promover la motilidad gastrointestinal, acelerar el metabolismo corporal y tiene un buen efecto preventivo sobre síntomas adversos comunes como indigestión, anorexia e hinchazón.
Eficacia y función del ébano
Sacia la sed: El sabor amargo del ébano puede estimular la secreción de saliva, producir fluidos corporales y calmar la sed. A menudo se utiliza para tratar la sed (como la diabetes), la fiebre, la sed, la sequedad de garganta, etc. En verano, la sopa de ciruelas se puede utilizar como bebida para calmar la sed.
Aliviar la tos: La ciruela negra tiene un sabor astringente y puede astringir los pulmones y aliviar la tos. Se utiliza para la tos crónica con poca flema por deficiencia pulmonar o tos seca sin flema. A menudo se utiliza junto con pinellia y almendra. Sin embargo, la evidencia empírica debe usarse con precaución.
Antidiarreico: La ciruela negra puede astringir los intestinos, detener la diarrea y la disentería, y puede usarse para la diarrea crónica por deficiencia del bazo, la diarrea crónica o la diarrea resbaladiza del intestino grueso e incluso el prolapso rectal.