Ensayo romántico suave
La abuela ha estado viviendo en la antigua casa en la que ha vivido toda su vida. En la pequeña casa apenas hay espacio para algunos muebles antiguos. El tocador colocado en la posición más llamativa es el tesoro más querido de la abuela. Dijo que esta era la dote que le dio su abuelo cuando se casó con ella. Al abrir el cajón, había muchos objetos antiguos cuidadosamente colocados en el interior, incluida una fotografía de la abuela y el abuelo. Si miras de cerca, todavía puedes ver un toque de juventud. El abuelo tomó la mano de la abuela y se paró debajo del sicomoro.
Recuerdo que cuando mi abuelo aún vivía, siempre podía verlo en el huerto del patio trasero. Mientras se pone el sol, sentado en la cresta junto a él, puedes ver que su figura se estira mucho. Aunque los años le han doblado la espalda, su amabilidad siempre ha reconfortado mi corazón. Todas las noches, el olor a comida provenía de la cocina. El abuelo y la abuela siempre salían de la mesa del comedor, se sentaban uno frente al otro, bebían vino y charlaban sobre las tareas del hogar. El color de la luna es muy claro y brillante. Puedo ver claramente los ojos de mi abuela tan claros como la luna, y lo más claro son los ojos del abuelo y la abuela en ese momento, lo que muestra el amor continuo que se esparce en el fondo. de mi corazón.
Una mañana, el sol todavía brillaba intensamente y la abuela estaba sentada en la puerta como una niña. El agua acumulada que quedó después de que la lluvia dejó de caer gota a gota a lo largo de los aleros y sobre sus hombros. Esa era la abuela que nunca había visto antes. Siguió mirando al cielo al otro lado durante mucho, mucho tiempo. Sólo entonces entendí por qué la abuela se resistía a mudarse de la vieja casa, porque la vieja casa no solo estaba llena de recuerdos del pasado, sino también del amor que el abuelo le dejó a la abuela. Pensé que la generación anterior no entendía el romance, pero en realidad su amor es más precioso y duradero. Creo que aunque no puedo entender un amor tan grande, puedo saber que la vida de mi abuelo es como la tierra que más amó en su vida, envolviendo un corazón simple con colores simples.
Aunque el abuelo ya no puede acompañar a la abuela, la abuela hace tiempo que entiende que al amor no le importa la distancia entre ellos, porque sus corazones siempre estarán juntos.