¿Cuál es la temperatura de la fiebre de la leche materna antes de poder amamantar a su bebé?
¿Qué tan alta es la fiebre durante la lactancia y no se puede amamantar?
Los médicos profesionales recomiendan que las mujeres embarazadas lactantes cuya fiebre supere los 38 grados dejen de amamantar y requieran un tratamiento sintomático oportuno para evitar afectar la leche materna y provocar una disminución de la misma. Al mismo tiempo, tome adecuadamente los medicamentos orales para el resfriado, preste atención a reponer agua durante este período, evite comer alimentos fríos y picantes que fácilmente provoquen calor interno y mantenga las heces suaves. Si no mejora después de tomar el medicamento, es necesario beber agua.
Cómo prevenir la fiebre durante la lactancia
1. Ventilar la habitación
El dormitorio de la nueva madre debe ventilarse de 2 a 3 veces al día durante 20 a 30 minutos. cada vez.Reduzca el crecimiento de microorganismos patógenos en el aire y prevenga las infecciones virales por fiebre.
Recordatorio especial: durante la ventilación, las nuevas madres y los bebés deben trasladarse temporalmente a otras habitaciones para evitar resfriarse debido al soplado directo de aire de convección.
2. Calidez y frialdad
En invierno, el dormitorio de una nueva madre debe ser cómodo y tranquilo, a la vez que cálido y resistente al frío. Lo mejor es mantener la temperatura interior entre 20 y 24 ℃. Si no hay calefacción en casa, puedes encender el aire acondicionado o la estufa eléctrica para mantener una temperatura interior adecuada.
3. Humedad adecuada
Si en invierno hay calefacción en casa se debe prestar especial atención a que el aire interior no sea demasiado seco. El aire seco puede provocar fácilmente sed, hemorragias nasales y dolor de garganta. Puede utilizar un humidificador o un recipiente con agua en el interior para mejorar la humedad del aire. La humedad del aire interior debe mantenerse entre 55 y 65ºC.
4. Presta atención al descanso
Mantén el buen humor y duerme lo suficiente. Un buen humor y un buen sueño pueden mejorar la resistencia del cuerpo.
5. Dieta equilibrada
Lleva una dieta equilibrada. En invierno, las nuevas madres deben comer más verduras, frutas y alimentos ricos en proteínas y vitaminas, que pueden promover el metabolismo celular normal y mejorar la inmunidad del cuerpo. También es necesario beber más agua, orinar más y eliminar las toxinas del cuerpo a tiempo para ayudar a resistir la invasión de los virus de la fiebre.
6. Piel limpia
Las nuevas madres sudan mucho y su ropa y ropa de cama suelen estar empapadas de sudor, lo que puede provocar que los gérmenes se multipliquen y crezcan fácilmente. Por lo tanto, la ropa, los pantalones y la ropa de cama de las nuevas madres deben cambiarse y ventilarse con frecuencia. Esto no sólo los mantendrá limpios, sino que también matará los gérmenes con la ayuda de los rayos ultravioleta del sol.
Las nuevas madres deben prestar atención a la prevención de diversas enfermedades. Sólo cuando la madre está sana el bebé puede prosperar.