Secuenciación de purinas de frutas
La gota es una enfermedad crónica causada por el aumento del ácido úrico. Aproximadamente el 80% del ácido úrico del cuerpo proviene de la degradación de las células del cuerpo o de su propia síntesis. La purina proviene de los ácidos nucleicos de las células y el ácido úrico es un metabolito de la purina. Algunas drogas, enfermedades, alcohol, deficiencia congénita de enzimas y otras razones pueden causar que el metabolismo del ácido úrico en el cuerpo se altere de esta manera, lo que lleva a una mayor producción de ácido úrico o una disminución de la excreción de ácido úrico, lo que resulta en un nivel elevado de ácido úrico en sangre. El 20% restante del ácido úrico proviene de los alimentos ricos en purinas de la dieta.
Por lo tanto, una dieta alta en purinas a largo plazo es sólo uno de los factores que conducen a la hiperuricemia o gota. Los pacientes con gota suelen ir acompañados de enfermedades crónicas como obesidad, hiperlipidemia, diabetes, hipertensión e hígado graso. Una vida y una dieta deficientes a largo plazo (comer demasiado pescado y carne, beber demasiado, comer demasiado y moverse muy poco, etc.) son causas importantes de complicaciones como los trastornos del metabolismo del ácido úrico en el cuerpo.
Los patrones dietéticos generalmente se dividen en tres categorías: alto en purinas, medio en purinas y bajo en purinas. No consumas demasiadas purinas en tu vida diaria, ya que pueden provocar ataques de gota. Debemos elegir adecuadamente alimentos bajos en purinas para controlar el crecimiento excesivo de ácido úrico.
Adjuntamos la tabla numérica de purinas a continuación.
Alimentos bajos en purinas. Los alimentos bajos en purinas se refieren a alimentos con un contenido de purinas inferior a 25 mg por 100 g de alimento.
1) Alimento básico: harina refinada de arroz y sus derivados (pan, bollería, galletas, etc.), almidones diversos, sorgo, patatas, boniatos, macarrones, etc.
2) Leche y huevos: leche y sus derivados (leche fresca, queso, yogur, leche en polvo, etc.), huevos y sus derivados (huevos, huevos de pato, huevos de codorniz, etc.).
3) Verduras: hortalizas (plumas de pollo, col china, col, lechuga, espinacas, apio, puerros, puerros, tomates, berenjenas), melones (pepino, melón de invierno, calabaza, calabaza, calabaza amarga, calabacín , etc.), rábanos (nabos, zanahorias, etc.), patatas, malanga, boniatos, etc.
4) Frutas: frutas diversas secas y frescas, zumos, mermeladas, etc.
5) Bebidas: té light, bebidas carbonatadas (refrescos, gaseosas, colas, etc.), agua mineral, extracto de malta, chocolate, gelatina, etc.
6) Otros: aceites diversos, azúcares (aunque no contienen purinas conviene utilizarlos adecuadamente), miel, sangre de cerdo, sangre de pollo, sangre de pato, medusas, cola animal o agar. condimentos.
Los alimentos bajos en purinas se pueden consumir con confianza. El contenido de purinas por cada 100 gramos de alimento es inferior a 50 mg: Cereales: arroz, trigo, sorgo, maíz, patatas, batatas, fideos, macarrones Huevos: huevos, huevos de pato, huevos en conserva Leche: leche, queso, hielo; cremas; bebidas: refrescos, chocolate, cacao, café, extracto de malta, jugos, té, miel, gelatinas y diversos aceites de frutas y vegetales;
Los alimentos con purinas moderadas deben consumirse en cantidades limitadas. Cada 100 g de alimento contiene de 50 a 150 mg de purina: carne: pollo, cerdo, ternera, cordero, pescado, camarones y frijoles cangrejo: frijoles negros, frijoles mungos, frijoles rojos, frijoles pintos, guisantes, frijoles rojos, frijoles secos; tofu, brotes de bambú secos, agujas de día, hongo Tremella, maní, anacardos, semillas de sésamo, etc.
Deben evitarse los alimentos ricos en purinas. Los alimentos que contienen de 150 a 1000 mg de purina por 100 g de alimento se consideran ricos en purina.
Hígado de res 233 mg, riñón de res 200 mg y páncreas 825 mg.
Caldo 160-400 mg Carnes diversas, sopas espesas y sopas claras a base de aves.
Tabla comparativa de purinas