Cómo y cuándo plantar lechuga
1. Germinación: Remojar las semillas en agua limpia durante 5 horas, escurrir el agua y luego germinar. Como las semillas son pequeñas, se pueden remojar sin agua caliente. La germinación se puede realizar aplicando capas de arena limpia y húmeda para su propio uso. Una capa de 20 cm de arena, colocar encima las semillas y cubrir con 2 a 3 cm de arena. Agrega cubitos de hielo y agua a un termo, mete las semillas para acelerar la germinación y cambia el agua una vez al día. O envuelva las semillas en un paño húmedo y póngalas en una incubadora a entre 15 y 20 grados y lávelas una vez al día.
Selección de suelo: elija un suelo ligeramente ácido, suelto, fértil, transpirable y bien drenado, elija semillas de trigo oleaginosas sanas y regordetas, remójelas en agua tibia durante 8 a 12 horas, sáquelas y envuélvalas en un paño húmedo y colóquelas en el refrigerador para que germinen. Plante las semillas tratadas en el suelo, cúbralas con una fina capa de tierra y riegue adecuadamente.
2. Época: La época normal de siembra de la lechuga es desde mediados o finales de abril hasta mediados de mayo o agosto o septiembre. Si se planta en invierno, suele ser una modalidad de cultivo en invernadero.
Cuidados de la lechuga
A las lechugas les gusta la humedad, por eso debemos mantener la tierra húmeda y proporcionarles suficiente humedad durante la plantación. Antes de plantar, esparza el fertilizante orgánico descompuesto uniformemente en el suelo, luego déle la vuelta y revuelva para permitir que los nutrientes del suelo se evaporen por completo. A la lechuga le gusta la luz del sol, por lo que necesita suficiente luz solar durante el cultivo, pero no es apta para la luz solar directa. Demasiada luz solar puede quemar sus tallos y hojas. Cuando el sol es fuerte en verano, se deben tomar medidas adecuadas de protección.
Durante el periodo de crecimiento vigoroso de las plántulas de hortalizas conviene regarlas suficientemente. Por lo general, el riego se debe realizar una vez al día. Si la fertilidad del suelo no es suficiente, se puede aplicar un fertilizante especial que contenga inoculantes microbianos para frutas y verduras. Durante las fuertes lluvias, el agua acumulada en el suelo debe eliminarse a tiempo.